Que los tratamientos utilizados para superar un cáncer afectan a la fertilidad es un hecho conocido por todos los médicos y casi todos los afectados. Es una de las secuelas graves de la quimioterapia, que se lleva por delante las células cancerígenas, sí, pero también otras células sanas que son delicadas, como las de la piel, las mucosas, y los óvulos.
Las células de la piel y mucosas se regeneran, los óvulos no. Por eso las mujeres que han sido tratadas para superar un cáncer normalmente sufren desarreglos menstruales, alcanzando la menopausia a edades muy tempranas. Es frecuente que se les retire la regla durante el tratamiento y ya no la vuelvan a tener, independientemente de su edad. A veces sí la recuperan, pero la “carga ovárica”, es decir, el número de óvulos que quedan en sus ovarios, se ha reducido mucho y ha bajado en calidad. Un intento de embarazo en estos casos resulta complicado.
“Hay mucho trabajo por hacer, muchas mujeres que necesitan ayuda para poder hacer realidad su sueño de convertirse en madres”
Los tratamientos de fertilidad que tanto han ayudado a parejas con dificultades, estimulan la producción de óvulos por medio de hormonas que se suministran a la paciente. O preparan el cuerpo de la mujer para la recepción y gestación de un embrión donado, también por medio de hormonas. Entre los diferentes tipos de cáncer de mama, un alto se denomina hormonal porque se alimentan de las hormonas femeninas para crecer, por ello a estas mujeres se les desaconsejaba realizar tratamientos de fertilidad.
Hoy en día, la investigación, los avances y también la humanidad de los médicos hacen posible que el embarazo tras un cáncer sea una opción. Por eso era necesario que naciera Baby Beatles. Porque aunque la sanidad pública española intenta paliar las secuelas de los tratamientos de quimioterapia, radioterapia y hormonales (otra terapia utilizada frente al cáncer de mama) en mujeres jóvenes, hay todavía mucho trabajo por hacer, muchas mujeres que necesitan ayuda para poder hacer realidad su sueño de convertirse en madres.
Creemos que ser madre es un derecho fundamental al que toda mujer debería poder optar, siempre y cuando la ética nos lo permita. Trabajamos para que se convierta en una realidad.